Robertino Pianezzone (oh boy)

Era niño, un niño común y corriente, como los hay pocos, me llevaba bien con los demas tenia mis complejos, era suelto y despreocupado, hasta que un dia llego la vida y me conto su historia, no sabia que seria igual a la mía pero me deje llevar por sus dramas y paradojas. Ahora ya no soy niño pero sigo pensando como tal, y eso puede ser algo traumatico para la gente que esta al lado mio, pero siempre logro alejarme de ellos, es bueno tratar de hacer el bien aunque nos quedemos solos, ¿o no es asi?.

Robertino Pianezzone vivia en la calle Jean Jaures y Honduras, muy cerca de plaza once, su familia, todos inmigrantes de diferentes paises, mezclados en un lugar, tratando de diferentes formas, de crear un generacion mas homogénea y identificadora, de lo que ahora parecia un monton de personas que no hablaban español. Él queria ir a la escuela, pero no sabria como seria, hasta fugarse de su casa, uno de esos pocos dias soleados que tiene el invierno para regalar, Robertino se escapó para entender esa impulsiva curiosidad por la escuela, todos los dias pasaba por la puerta y no se explicaba porqué . Entonces decidio ir a una que quedaba por la calle Carlos Gardel y una cortada cuyo nombre no recuerdo. Se paro enfrente de la gran puerta (para un niño todo es grande) y se lleno de preguntas y dudas al intentar cruzarla. En ese momento no habia nadie en la escuela, ni portero, ni alumno, ni maestro, poco sabia Robertino de estos y mucho menos de lo que la escuela se trataba.

Entonces decidió entrar, despues de quedarse 10 minutos asombrado interrumpidamente por las dudas que lo miraban. Cuando entró era recreo y pudo ver todos esos niños corriendo sin sentido para todos lados, gritando y siendo niños. Él ahora no sabria como ser niño, pensó que la niñez se trataba de eso, de ir todos los dias a un lugar a jugar con sus amigos o compañeros, talvez de tornarse enamoradizo y sin nocion de tiempo y peligro, pero era tarde, Robertino no los entendia, el ya tenia la noción de lugar, y ese no era su lugar, él ya tenia noción de tiempo, y el tiempo era dinero, Él ya sabia lo que era peligroso, peligroso era intentar ser niño, pero el ya tenia la noción de pobreza y sabia que ninguno en ese colegio tenia muestras de trabajar como él, o una simple cara de tristeza, él ya sabia que las caras de tristeza no servian para otra cosa que mostrar tristeza y no iba a querer seguir allí, con esa inutil cara de tristeza (llorar era cosa de niños). Todo pero todo pensamiento de niño se habia insertado en él como una decepcion, él nunca podria ser niño, era muy dificil gastar el tiempo corriendo y jugando cuando tus manos solo pueden ser utiles para darte de comer,"no comprendo como ellos lo hacen, pero para mi ya es tarde" . Ahora, la decepcion era mas grande, no solo sabia que su niñez habia terminado si no que no habia nadie alli para negárselo, ya que aparecio una maestra, medio anciana quien preguntandole quien era , lo convirtió en un extraño, no en un niño, y asi fue como el corrio hacia la salida, decidido a no volver, sabiendo que no era niño y encima de todo eso que era un extraño.

Por eso Robertino decidió dejar el alma de la infancia en un rincon angosto de su corta vida, a eso le llamo niñez aunque no tenia nada de eso llamado jugar o gritar, ahora quien pensaria que el tiempo iba a correr mas rapido para él si nadie pensaba en él. Asi como nadie llega a pensar en mas de uno, nadie penso en él.

Y asi fue como Robertino dejo una cosa que se llama inocencia fuera de la niñez y la convirtio en ignorancia, con el paso de los años se fue haciendo mas grande y desfenestrante.Fin (¡fin maldito fin!)

Moraleja: Si ven a un niño en la calle, denle de comer, no dinero, comprenle un sanguchitooo...o una golosina para sacarle el hambre, porque el dinero la mayoria de las veces no es para ellos...si le dan dinero esta tiene que ser la unica opcion que hay...